El lavado de manos quirúrgico tiene como objetivo eliminar el mayor número posible de microorganismos presentes en manos y brazos antes de entrar en quirófano para evitar la contaminación cruzada. 

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El lavado de manos quirúrgico, a diferencia del lavado de manos convencional, se realiza con composiciones jabonosas que contienen clorhexidina y se aplica sobre manos de forma exhaustiva y antebrazos.

 

El primer lavado del día debe durar 5 minutos, más de este tiempo se ha asociado a irritación.

Los lavados posteriores deben tener una duración aproximada de 2 minutos. 

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A continuación un vídeo sobre  el taller realizado en el Hospital Santo Tomás a cargo del Dr. Victoria.